
Mediación formal
Es una fórmula que permite que un mediador ayude a dos o más partes a facilitar la comunicación y el entendimiento entre ellas. Ha de haber equilibrio y responsabilización de las partes. En el proceso se ha de respetar los principios de confidencialidad, imparcialidad, neutralidad y voluntariedad.

Prácticas restaurativas
Son distintas fórmulas que facilitan la reparación, reforzamiento o incluso de creación de vínculos en la comunidad así como la reparación de los daños generados por los victimarios a sus víctimas en distintos ámbitos y contextos (escolar, comunitario, familiar, vecinal, discriminación por sexo, raza, clase social, etc.). En todas las prácticas restaurativas es fundamental el principio de voluntariedad, y se aplican técnicas similares, como la Comunicación No Violenta, Escucha Activa, empatía, pero se aplican en situaciones distintas y los objetivos difieren. La mediación formal podría ser un caso particular en el que hay un equilibrio entre las partes, y unas dificultades de comunicación que les impide gestionar un conflicto.

Prácticas restaurativas proactivas
Las prácticas restaurativas proactivas inciden en la creación y reforzamientos de los vínculos comunitarios con distintas fórmulas que proporcionen a las personas herramientas para gestionar los conflictos evitando su escalada.

Prácticas restaurativas responsivas
Son fórmulas orientadas a responder a una situación en la que ya se ha producido un daño y es necesario repararlo.

Provención
Consiste precisamente en proporcionar herramientas a las personas no para evitar los conflictos (que no suele ser posible), si no para gestionarlos e impedir su escalada.

Comunicación no violenta
La comunicación es una herramienta, una habilidad no fácil de conseguir y un lenguaje que nos permite conectar y comunicarnos con otras personas evitando reproches, amenazas, comparaciones o agravios.
El "padre" de la Comunicación No Violenta, Marshall Rosenberg, estructura la CNV en dos caminos y 4 fases:
-1.El de la empatía hacia nosotros mismos que podrá generar (si es lo que queremos) una expresión no violenta.
-2. El de la empatía hacia el otro, que producirá una escucha empática.
Las fases, que identifican las dificultades del proceso, serían las siguientes:
-1. Diferenciasr observaciones de juicios.
-2. Expresar sentimientos, no pensamientos.
-3. Expresar necesidades, no estrategias.
-4. Hacer peticiones, no exigencias.

Escucha activa
La escucha activa es una de las herramientas fundamentales en la mediación y en las prácticas restaurativas en general. No es fácil de adquirir, requiere poner todo interés, atención y empatía en la escucha, empleando todas nuestras capacidades cognitivas, concentrándonos de verdad en lo que la otra persona nos quiere decir y no en lo que pensamos nosotros.
Se ha de mostrar en nuestro lenguaje verbal y no verbal hacia la persona que escuchamos, con la posición de nuestro cuerpo, asintiendo, haciendo preguntas o parafraseando y reformulando lo que recibimos de la persona que nos habla.